El polígono industrial de Can Montcau-Can Malé en Lliçà d’Amunt (Vallès Oriental) será la futura sede logística mundial y de venta outlet del grupo Mango. Una industria de última generación que ocupará 300.000 m2, de los que 10.000 m2 se destinarán a la venta al público de género «fuera de temporada». La textil invertirá 250 millones en el complejo, que empezará a levantarse este año, como base para la planificación estratégica de la próxima década.
Parte de la inversión prevista se destinará a construir un espacio único de 10.000 m2, el máximo que permite la nueva ley del Comercio en una zona periférica, que Mango dedicará a la venta al público de los productos de temporadas anteriores. El centro de venta tendrá la misma superficie que La Roca Village, el outlet situado a tan solo diez kilómetros de Lliçà d’Amunt.
Ambas zonas comerciales «no se parecerán en nada», aclara Pere Grau (CiU), concejal de Urbanismo, ya que la de Lliçà será una única nave industrial en un polígono con una superficie de 400.000 m2. «Nada que ver», asegura Grau, con el entramado de tiendas con aire mediterráneo de La Roca del Vallès.
Resueltas las alegaciones, solo resta la aprobación de la Comissió d’Urbanisme de la Generalitat para que los 300.000 m2 de la multinacional textil se repartan entre una gran nave para usos terciarios (logística), locales comerciales, oficinas (en una masía catalogada), una zona hotelera y el outlet de 10.000 m2, «todo con un diseño integrador y nada agresivo», asegura Grau, que añade: «La zona tendrá 200 kilómetros de calles».
Mango adquirió el terreno en 1998 con la idea de instalar su centro de distribución mundial y, según fuentes de la firma, «mantenemos el proyecto del outlet». De cumplir con las previsiones, en diez años la empresa calcula que tendrá un volumen de negocio superior a los 2.300 millones de euros y 2.500 puntos de venta en todo el mundo, a un ritmo de 150 nuevas tiendas por año.
5.000 EMPLEOS / Al gobierno de Lliçà le complace que el proyecto empiece este año ya que, según afirman, «será un gran dinamizador socioeconómico» que otorga nuevas perspectivas al municipio. La implantación de Mango generará empleo no solo con el centro logístico, «sino también con las empresas satélites que podrán instalarse aquí», apunta Pere Grau. En Can Montcau, solo el gran complejo de distribución de Mango empleará a 5.000 personas.
En el polígono, junto a la textil, se instalará otra empresa de Lliçà que también amplía instalaciones, Biokit, especializada en productos de diagnóstico de enfermedades. La modificación urbanística permitirá que el espacio que ahora ocupa la farmacéutica libere un terreno urbano para equipamientos y viales de conexión con los núcleos urbanos más alejados del centro.
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